jueves, 21 de marzo de 2013

Tocan la puerta

Tocan la puerta, ¿quién es? no abras. Espera un momento, deja que pase un tiempo, no lo hagas, te desespera la duda, saber si hay alguien o si es la  nada, si es tu memoria o si es la añoranza, pasaba un momento allí nuevamente, tocan la puerta, ¿quién es? no abras, arruga la frente, cubre tu cabeza con la frazada, no te responden, solo aguarda, o quizá no, no salgas, no abras, ¿quién es? tocan la puerta, tus sandalias, la puerta, la esperanza, la humedad ha manchado tu cama, y el peso de la pena ha rodado al suelo mientras se escucha en el pasadizo claro y oscuro tres veces, tú sabes quién es o no lo quieres saber, tocan la puerta otra vez ¿quién es? no abras, llora un poco más, escucha la melodía hosca del rechinar de tus dientes y sigue el compás de tu llanto, que dure una blanca el silencio que entrecorta el gemido habitual que te acompaña, no hay respuesta a tu dolor ni tampoco a tu pregunta ¿quién es? no abras, espera un segundo, respira, calma ese pecho, calma, no busques en la oscuridad, descansa. Ya dejarán de llamar,  dejarán en paz tu alma y ese jardín abandonado, seco, feo, tan gris, se hundirá en la tierra mientras una voz agonizante habla de un amor tildándolo de etéreo. Maldices tú, maldigo yo. Tocan la puerta ¿quién es? no abras. O sal a la fuerza y salta a la ducha, abre, brincando, la llave, métete un baño con agua caliente, que humee, ardiendo, así tus lágrimas se esconderán y el llanto se ahogará en la garganta y se largará por los hoyitos de la desgracia y nadie sabrá que has muerto, o que has caído en la trampa, creíste haberla encontrado pero otra vez  la has perdido, pensarás quizás sea ella quien va camino al fin. Tocan la puerta. No, ¿quién es?mejor no, no abras, mejor llora en tu cama siente cómo te abraza, toma la almohada, suelta ese vaso, para que te quedes dormido como un recién nacido y se tú mismo, rasca tu cabeza, acurrúcate niñito, acuérdate de tu papi, el difuntito, ponte nuevamente a soñar, refúndete en el trémulo silbido del viejo guachimán. Tocan la puerta, Fernando, tocan la puerta. Fernando, soy yo. Tocan la puerta. No abras.

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